El bromo, hipoclorito de sodio, cloro químico se pueden emplear para sistemas manuales y automatizados de la piscina, ello mediante bombas dosificadoras y sondas.
Sistema físico-químico
Este sistema tiene más apartado para limpiar y así tener en óptimas condiciones tu piscina. Este tipo de sistema puede realizarse por medio de diversos componentes.
Sistema de ionización cobre, plata o hidrólisis de la sal
es uno de los sistemas mayormente eficaces, ya que puede destruir microorganismos de gran resistencia; incluso, elimina a todos aquellos que algunos procesos químicos no logra eliminar.
Tener una adecuada instalación de este tipo de sistema sobre la red de circulación de agua produce grandes beneficios, entre los cuales se encuentran los siguientes: alguicida, bacteriostáticos, estabiliza el ph y provee efecto anti incrustante.
Electrolisis de sal
También conocido como cloración salina. Este sistema se encarga de la producción de hipoclorito de sodio mediante sal y agua. El material a pesar de combinar alta tecnología e ingeniería, se caracteriza por ser económico; además, no significa una amenaza para la piscina y el manejo de ésta.
¿Qué es lo que pasa en este sistema? Es un proceso sencillo, el agua salada pasa por el proceso de electrolisis de sal y se convierte en hipoclorito de sodio, el cual es un agente importante para desinfectar el agua; sin embargo, cuando el agua que ya se ha desinfectado retorna en la piscina y mantiene contacto con el aire, el hipoclorito vuelve a convertirse en sal, la que se encuentra disuelta en el agua.
Lo que se acaba de explicar, es una manera de cómo se genera cloro puro sin necesidad de otros productos que son indeseables y en ocasiones perjudican la salud de las personas, por ejemplo: irritación en los ojos, mucosa y piel. Pese a su gran efectividad, sí es necesario controlar los niveles de pH.
Tratamiento por UV
O bien, tratamiento por luz ultra violeta, el cual es un sistema automático de rayos UV. Lo que provoca este equipo es una desinfección doble del agua e implica una menor suma de cloraminas; pero, sí produce una neutralización de bacterias, virus y demás microorganismos que puedan estar en el agua.
El resultado que se obtiene a través de este equipo es una mejor calidad de agua, no hay malos olores y mucho menos irritación en los ojos. Al igual, permite el ahorro en productos químicos y renovación de agua para su desinfección. No obstante, es un excelente apoyo, pero sí se requiere el apoyo de otros productos para tener el agua en óptimas condiciones.
Ozono
Este tratamiento consiste en desinfectar y de manera eficaz, tal es así que puede reemplazar a otros químicos: cloro y bromo.
Cuando el ozono se emplea para desinfectar actúa como oxigeno, por lo tanto, no deja rastro alguno en el agua. Para que los resultados sean mejores, es un requisito combinar el ozono con otro agente para desinfectar de manera óptima.
Hay diversos métodos que permiten la producción de ozono de manera artificial, pero es uno el que resulta ser más eficaz: mediante electricidad.
La producción de ozono mediante electricidad se le conoce como proceso de descarga de corona, el cual necesita oxigeno que se extrae del aire y precisamente de electricidad. Gracias al ozono que se genera en la piscina, podemos decirle adiós a los malos olores, no más ojos rojo y demás agentes que provoca el uso de cloro. Sin embargo, una de las mayores ventajas de este producto, es el costo y la instalación, los cuales se ahorran.
Por otra parte, a comparación de los otros métodos mencionados, en este caso se requiere de un espacio grande, debido a que la maquinaria que se emplea es grande.
Si lo que buscas son excelentes resultados en el agua de tu piscina, no olvides combinar más productos. De cualquier manera, no dudes en acercarte con los profesionales, quienes te asesorarán e instalarán los productos que consideren necesarios.