Existen algunos tipos de alberca que dependen en gran medida de la forma en la cual se construyen y el material del cual están hechas. Cada una tiene características más ventajosas que las otras y también debilidades.
Las albercas que están sobre piso son muy económicas ya que la construcción de las mismas sale bastante barata. Lo malo de las albercas que poseen estas características es su diseño por lo general no es tan vistoso y su durabilidad también es menor.
Las piscinas de fibra de vidrio están hechas de un material muy resistente hecho de fundir vidrio lo que lo hace muy flexible y durable. Pueden llegar a durar un siglo si se mantienen en buenas condiciones y son más durables que una alberca de plástico o una de acero. Otra ventaja es que pueden ser movidas ya que su instalación es de la armazón entera.
Las piscinas que ocupan un lugar intermedio tanto en precio como en calidad en el mercado son las albercas prefabricadas las cuales poseen los beneficios de las albercas desmontables y los de las que se construyen en el lugar mismo.
Después tenemos un tipo de albercas que se instalan sobre el piso son que se tengan que amarrar al suelo son las albercas desmontables que son de muy bajo costo y el mantenimiento así como su armado son muy simples.
Las albercas con forro de vinilo son muy parecidas a las que están sobre el suelo solo que estas últimas son bastante más económicas y su duración apenas supera la década.
Por último y uno de los tipos de alberca más innovadoras del mercado están las albercas gunite, las cuales tienen un sistema de armado muy sólido. Esto quiere decir que con menos material obtenemos más resistencia. La capa “gunitada” por el cemento forma una superficie compacta a la vez que sólida. Este material permite tener albercas completamente novedosas y con diseños imposibles pero con excelentes acabados que se ajustarán a la medida de las posibilidades.
Foto: Cordobapool S.L.